El jabón

El jabón es un producto personal que se utiliza todos los días. Su función principal es mantener la piel limpia, protegiéndola de agentes externos; dependiendo de sus ingredientes también puede ser muy útil para mejorar el aspecto de la piel.
Generalmente la mayoría de la población utiliza jabón común, sin embargo en algunos casos es imprescindible utilizar uno específico por el tipo o el estado de la piel.

Tipos de jabones:

Jabón común: está elaborado por lo general con sebo grasoso y sodio o potasio y suele estar recomendado para todo tipo de piel.

Jabón neutro: la mayoría de expertos coinciden en que el jabón más adecuado para la piel es aquel que tenga un pH similar al de la piel, por ello para muchos este tipo de jabón es la mejor opción. En su elaboración no se le añade ni aroma ni color artificial. El pH de la piel mide su grado de acidez y representa la cantidad de iones de hidrógeno en la hipodermis, una capa de la piel ligeramente ácida que se encuentra entre la epidermis y la dermis, encargada de lubricar la piel y protegerla de los agentes externos.

Jabón humectante: está elaborado con aceites vegetales o grasas enriquecidas con aceite de oliva o de avellana, entre otros igual de saludables. Creado especialmente para pieles que requieren mayor humedad por estar demasiado secas.

Jabón de glicerina: tiende a resecar la piel, por este motivo está indicado para aquellas pieles más grasas.

Jabón suave: elaborado pensando en las pieles más sensibles y con compuestos de aguas termales.

Jabón aromático: elaborado con esencias frutales o florales, no está especialmente recomendado para el cuidado de la piel.

Jabón de avena: gracias a sus componentes, se caracteriza por tener propiedades emolientes, suavizantes y cicatrizantes. Por ello, su uso está recomendado para pieles secas o muy sensibles.

Fuente:
http://salud.facilisimo.com/reportajes/consejos/que-jabon-utilizar-segun-el-tipo-de-piel_995095.html
http://otramedicina.imujer.com/5239/crema-casera-para-equilibrar-el-ph-de-la-piel